El Poder Judicial en manos del pueblo: una decisión histórica: Armenta

Puebla.- El próximo 1 de junio marcará un antes y un después en la historia democrática de México. Por primera vez, la ciudadanía podrá elegir directamente a los integrantes del Poder Judicial de la Federación, en un ejercicio inédito que busca transformar desde la raíz uno de los pilares fundamentales del Estado mexicano.
El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, ha hecho un llamado enérgico y contundente a participar en este proceso electoral, recordando que el voto no es solo un derecho, sino una herramienta poderosa para combatir la impunidad, la corrupción y las complicidades que han empañado la impartición de justicia en nuestro país.
Durante años, diversos sectores de la sociedad han denunciado que algunos jueces federales han favorecido con sus decisiones a delincuentes, debilitando la labor de las fuerzas de seguridad y sembrando desconfianza en el sistema judicial.
Armenta no dudó en sumarse a la indignación de instituciones como la Sedena, la Marina y la Guardia Nacional, señalando que “no es posible que los delincuentes compren su libertad” mientras la ciudadanía sigue siendo víctima de la violencia y el abandono legal.
La reforma judicial, aprobada en septiembre de 2024 y de la cual Armenta fue precursor durante su paso por el Senado, cambia radicalmente la manera en que se conforma el Poder Judicial.
Por primera vez, se elegirá por voto directo a jueces, magistrados y ministros, incluyendo a quienes integran la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Tribunal Electoral y otros órganos fundamentales para la impartición de justicia.
Esta elección no es menor. Representa una oportunidad histórica para reconstruir la confianza social en las instituciones judiciales, pero también conlleva una enorme responsabilidad.
Elegir a quienes impartirán justicia no puede ni debe ser un acto impulsivo ni desinformado.
La ciudadanía debe acudir a las urnas con conciencia plena de lo que está en juego: el futuro de la justicia en México.
Como bien dijo el gobernador poblano: “Nuestro voto puede marcar la diferencia entre la justicia y la complicidad”. Y tiene razón. Este 1 de junio, no solo elegiremos representantes; decidiremos el rumbo ético y legal de nuestra nación.
Frente al reto, es indispensable informarse, debatir y, sobre todo, participar. Porque si el Poder Judicial ha de estar verdaderamente al servicio del pueblo, es el pueblo quien debe tomar la palabra con responsabilidad.