Leyendo ahora
Basura electoral en Puebla: Un problema medioambiental

Basura electoral en Puebla: Un problema medioambiental

blank

En las fachadas de casas, bulevares y calles de Puebla, aún cuelgan las lonas con las imágenes de los candidatos que compitieron en las elecciones del pasado 2 de junio. Estos artículos, conocidos como “basura electoral”, tienen una vida útil de solo un lustro, pero pueden tardar más de 150 años en degradarse, lo que representa un grave problema para el medio ambiente, según especialistas y activistas.

El término “basura electoral” se ha popularizado en los últimos años para describir aquellos objetos que se distribuyen durante las campañas pero que son de poca utilidad. En entrevistas, expertos han señalado la urgencia de cambiar la manera tradicional de hacer proselitismo y buscar métodos que permitan a los aspirantes a cargos públicos darse a conocer sin dañar el entorno. Cada tres o seis años, la situación se repite, agravando el problema ambiental.

Recorrido por Puebla

Durante un recorrido por unidades habitacionales como La Margarita, San José Xilotzingo, Avenida Las Torres, el Centro Histórico y la 11 Sur, se constató la permanencia de lonas con imágenes de los candidatos que participaron en las últimas elecciones. Las caras de Claudia Sheinbaum Pardo y Xóchitl Gálvez Ruiz, quienes compitieron por la presidencia del país, aún se pueden ver, al igual que las de Alejandro Armenta Mier y Eduardo Rivera Pérez, los principales contendientes para el gobierno de Puebla.

En algunos hogares, las lonas se han vuelto ilegibles con el tiempo, dejando solo superficies blancas y desgastadas. Algunos vecinos reconocieron que apoyaban a los candidatos de las lonas y permitieron su colocación, mientras que otros aceptaron las mantas contra su voluntad, pero no hicieron nada al respecto porque no les afectaba gravemente.

Opinión de los Expertos

Francisco Javier Sánchez Ruiz, profesor de la Facultad de Ingeniería Ambiental y Desarrollo Sustentable de la Universidad Popular Autónoma del Estado (UPAEP), explicó que las lonas están hechas comúnmente de polímeros de alta densidad como el polietileno y los polivinilos. Estos materiales tienen una fuerte composición que permite soportar cambios drásticos de temperatura, pero tardan más de 150 años en degradarse. Esto las convierte en un problema ambiental significativo, ya que cada periodo electoral se colocan innumerables lonas que afectan el entorno.

El académico también mencionó que, aunque ha disminuido el uso de artículos poco amigables con el medio ambiente en los últimos años, esta reducción es insuficiente debido a la falta de políticas públicas efectivas para cuidar el ambiente durante las campañas electorales. Propuso la implementación de estrategias para dar un segundo uso a las lonas, como triturarlas para fabricar ladrillos que podrían utilizarse en la construcción de casas.

Guillermina Margarita López Corral, responsable de Acción Ambiental en la Universidad Iberoamericana campus Puebla, recordó que la actual forma de hacer política data de décadas atrás y ha perpetuado el uso de materiales dañinos para el medio ambiente. Ambos especialistas consideran urgente que las autoridades implementen programas para disminuir los contaminantes derivados de las lonas y que los partidos políticos eviten replicar métodos de campaña que impliquen la distribución masiva de estos materiales.

Alternativas Sostenibles

María Esther Ayón Jiménez, representante de la Fundación Salva al Mar, destacó que el trabajo en tierra durante las campañas electorales es más beneficioso para los candidatos porque permite escuchar directamente las propuestas y reduce los efectos negativos en el medio ambiente. Sugirió el uso de redes sociales y medios digitales para hacer campaña, así como la adopción de materiales más amigables con el entorno.

See Also
blank

La reutilización de lonas también ofrece soluciones prácticas para las familias. Estas pueden usarse para cubrir automóviles, bicicletas o lavadoras, protegiéndolos de las inclemencias del clima. En Ciudad de México, la creatividad ha llevado a la creación de casas para perros, bolsas y carteras a partir de lonas recicladas, ejemplos que podrían replicarse en Puebla.

El artículo 235 del Código de Instituciones y Procesos Electorales del Estado estipula que los partidos deben retirar su propaganda electoral dentro de un plazo no mayor de siete días posteriores a la jornada electoral. Sin embargo, no existe información pública del Instituto Electoral del Estado (IEE) sobre el número de lonas retiradas en el último proceso electoral.

La basura electoral sigue siendo un problema persistente en Puebla y otras regiones. Aunque algunos avances se han logrado, es crucial que se adopten políticas más sostenibles y se fomenten prácticas de reutilización para mitigar el impacto ambiental de las campañas electorales. La colaboración entre autoridades, partidos políticos y ciudadanos es esencial para encontrar soluciones que protejan nuestro entorno y promuevan un proselitismo más responsable.

Rene Castilla

View Comments (0)

Leave a Reply

Your email address will not be published.


© 2024 Grupo Transmedia La Chispa. Todos los derechos reservados