Incendio en fábrica de China deja 36 muertos
Al menos 36 personas murieron y otras dos se encuentran desaparecidas tras el incendio de una fábrica en el centro de China, indicaron el martes medios estatales, citando a las autoridades locales.
El fuego afectó “una planta en la ciudad de Anyang, en la provincia de Henan en el centro de China, el lunes por la tarde“, señaló la agencia oficial de noticias Xinhua.
Los medios estatales indicaron que los equipos de rescate fueron informados a las 16H22 (08H22 GMT) del incendio de las instalaciones de Kaixinda Trading Co., Ltd.
“Tras recibir la alarma, el destacamento municipal de rescate de incendios fue enviado inmediatamente al lugar”, indicó el canal estatal CCTV.
“Unidades de seguridad pública, respuesta de emergencia, administración municipal y suministro de energía corrieron al lugar al mismo tiempo para manejar la emergencia y los trabajos de rescate”, añadió.
Según este medio, el incendio quedó extinguido sobre las 23H00 locales.
Además de los 36 fallecidos y los dos desaparecidos, hay otras dos personas hospitalizadas pero sin que corra en riesgo su vida, añadió CCTV.
Las autoridades indicaron que hay “sospechosos criminales” bajo custodia en vinculación a este incendio, pero no aportaron más detalles.
Los accidentes industriales son habituales en China, a menudo causados por un escaso cumplimiento de la normativa de seguridad.
En junio, una persona murió y otra resultó herida por una explosión en una planta química en Shanghái.
El incendio en la fábrica Sinopec Shanghai Petrochemical Co. en el distrito periférico de Jinshan emitió enormes y densas nubes de humo negro en una vasta zona industrial que oscurecieron el cielo.
El año pasado, una explosión de gas mató a 25 personas y redujo a escombros varios edificios en la ciudad de Shiyan, en el centro del país.
En marzo de 2019, una explosión en una fábrica química en Yancheng, a 260 kilómetros de Shanghái, mató a 78 personas y destruyó casas en un radio de varios kilómetros.
Y en 2015, una gigantesca detonación en un almacén químico en la ciudad septentrional de Tianjin causó 165 muertes, en uno de los peores accidentes industriales ocurridos jamás en el gigante asiático.