Mario Marín Torres, del Altiplano a Prisión Domiciliaria en Puebla
Mario Marín Torres, exgobernador de Puebla, volvió a su hogar en la zona de Xilotzingo, Puebla, la madrugada del 14 de agosto, pero esta vez bajo un estricto arresto domiciliario. Después de su salida del penal de máxima seguridad del Altiplano en el Estado de México, donde permaneció detenido por más de dos años, Marín Torres fue trasladado a su domicilio en el Residencial San Ángel, un conjunto habitacional ubicado en Xilotzingo.
La decisión de otorgarle la prisión domiciliaria fue motivada por el deterioro de su salud. Según su defensa, Marín contrajo una afección pulmonar durante su tiempo en el penal de Cancún, Quintana Roo, donde ingresó en febrero de 2021, y que supuestamente se agravó tras su traslado al Altiplano. Esta condición de salud fue el argumento principal para solicitar el cambio de medidas cautelares, petición que finalmente fue aprobada por la jueza Angélica del Carmen Ortuño Suárez, tras la obtención de un amparo a su favor.
Un Traslado Bajo Estricta Seguridad
Poco antes de la medianoche del 14 de agosto, Marín Torres salió del Altiplano en una ambulancia de la Guardia Nacional, escoltado por un fuerte convoy de seguridad. Cerca de las 3:00 horas, llegó a su residencia en Xilotzingo, donde fue recibido por familiares. El exgobernador cumplirá su arresto domiciliario en esta casa, ubicada en un conjunto residencial que fue aprobado como su lugar de reclusión.
El exmandatario ahora deberá portar un brazalete electrónico, una de las condiciones impuestas para que pueda continuar con su proceso legal desde su domicilio. La jueza del caso determinó que Marín Torres no es considerado un reo de alta peligrosidad ni presenta un riesgo significativo de fuga, lo que permitió que se le otorgaran estas medidas menos restrictivas.
Reacciones y Contexto
La noticia del cambio de medidas cautelares de Mario Marín Torres ha generado diversas reacciones, particularmente de Lydia Cacho Ribeiro, la periodista mexicana cuyo caso de tortura en 2005 llevó a la detención del exgobernador. El 10 de agosto, Cacho advirtió públicamente sobre la posibilidad de que Marín Torres fuera liberado, una situación que finalmente se concretó días después. Cacho, quien ha sido una figura central en el caso, ha expresado su preocupación por las implicaciones de esta decisión judicial.
Marín Torres fue buscado desde abril de 2019 junto al ex jefe de la Policía Judicial, Adolfo Karam Beltrán, y el empresario Kamel Nacif Borge. Los tres enfrentaron órdenes de aprehensión por su participación en la tortura a Lydia Cacho, un caso que atrajo la atención internacional. Aunque los tres fueron detenidos, actualmente solo Marín Torres y Karam Beltrán continúan con su proceso legal bajo arresto domiciliario, mientras que Kamel Nacif ya se encuentra en libertad.
Implicaciones del Arresto Domiciliario
El arresto domiciliario de Mario Marín Torres representa un giro significativo en su proceso legal, que aún no ha concluido. Si bien esta medida le permitirá estar en su casa en lugar de una prisión, su libertad sigue restringida bajo la supervisión de las autoridades. Este cambio ha generado un debate sobre la justicia y la aplicación de la ley en casos de alto perfil como el de Marín.
El caso de Mario Marín Torres sigue siendo un tema de gran relevancia en Puebla y en el ámbito nacional, especialmente por sus implicaciones políticas y legales. Su permanencia en Xilotzingo bajo arresto domiciliario será observada de cerca por la sociedad y los medios de comunicación, mientras continúa el proceso en su contra por uno de los casos de tortura más emblemáticos en la historia reciente de México.
