El Papa Francisco Extiende su Solidaridad al Sur de Etiopía tras Devastador Deslizamiento de Tierra
El Papa Francisco ha dirigido sus pensamientos y oraciones a la población del sur de Etiopía, afectada por un deslizamiento de tierra ocurrido el pasado 23 de julio, durante sus saludos tras el Ángelus. El desastre ha causado una devastación considerable, y el pontífice ha expresado su cercanía con las víctimas y aquellos que están brindando ayuda en el terreno.
“Aseguro mis oraciones por las víctimas del gran desprendimiento de tierras que arrasó un pueblo del sur de Etiopía. Estoy cerca de esa población tan probada y de quienes están llevando socorro”, manifestó Francisco, mostrando su preocupación por las catástrofes naturales y su impacto en las comunidades vulnerables.
En un fuerte llamado a la comunidad internacional, el Papa denunció la continua fabricación y venta de armas en un mundo donde muchos sufren por calamidades y hambre. “Y mientras hay tanta gente en el mundo que sufre por las calamidades y el hambre, se siguen construyendo y vendiendo armas y quemando recursos, alimentando guerras grandes y pequeñas. Esto es un escándalo que la comunidad internacional no debe tolerar, y contradice el espíritu de fraternidad de los Juegos Olímpicos que acaban de comenzar. No lo olvidemos, hermanos y hermanas: ¡la guerra es la derrota!”, subrayó el pontífice.
El Papa Francisco Extiende su Solidaridad al Sur de Etiopía tras Devastador Deslizamiento de Tierra
Mientras tanto, en Etiopía, se han declarado tres días de luto nacional a partir de hoy, y los equipos de rescate continúan trabajando en Kencho Shacha Gozdi, la zona más afectada por el deslizamiento. Los sobrevivientes, aún conmocionados, han comenzado a enterrar a las víctimas de lo que se considera el deslizamiento de tierra más mortífero jamás registrado en el país. Hasta ahora, se ha confirmado la muerte de aproximadamente 260 personas, aunque se teme que la cifra pueda aumentar significativamente.
El primer ministro etíope, Abiy Ahmed, visitó el sitio de la tragedia el sábado, situado a 480 kilómetros de la capital, Addis Abeba, y plantó un árbol en un cementerio en señal de respeto y solidaridad. Las operaciones de búsqueda y rescate seguirán adelante, según confirmó un portavoz del gobierno, mientras que unas 500 personas desplazadas están recibiendo asistencia de emergencia.
La tragedia ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de apoyo internacional y la solidaridad global para ayudar a las comunidades afectadas por desastres naturales y conflictos, reflejando el mensaje del Papa Francisco sobre la fraternidad y la paz mundial.