Miles de fans de Scorpions acampan fuera de la Feria
Puebla — Entre lonas, cobijas improvisadas y el olor persistente a elote asado, decenas de fanáticos de Scorpions resisten la espera frente a los accesos del Teatro del Pueblo en la Feria de Puebla 2025. Lo que para muchos es una tarde cualquiera de primavera, para ellos es la antesala de un evento inolvidable: un concierto gratuito de una de las leyendas vivas del hard rock y el heavy metal.
La emoción se respira en el ambiente desde la madrugada del miércoles 7 de mayo, cuando comenzaron a llegar los primeros fieles con casas de campaña, mochilas desgastadas y termos de café. Algunos, como Alexis, viajaron desde municipios como Tehuacán —a más de dos horas de distancia— en cuanto supieron que la banda sí se presentó en Aguascalientes, despejando dudas tras la bronquitis bacteriana que afectó al vocalista Klaus Meine.
“Fue un alivio ver que tocaron en San Marcos. Apenas me enteré, agarré mis cosas y me lancé”, dice Alexis, quien llegó con una lona que ahora es su refugio contra el sol ardiente del mediodía y el aire frío que baja con fuerza al anochecer.
Sin condiciones de salubridad
Sin embargo, la pasión tiene su precio. La zona de espera carece de condiciones mínimas de salubridad. El calor incrementa el hedor de los baños portátiles, insuficientes y mal higienizados, mientras los residuos de comida y envases comienzan a acumularse a los costados de la fila.
La tierra seca se levanta con cada paso y se mete en las fosas nasales, y no son pocos los que han optado por cubrirse el rostro con bufandas o mascarillas.
“La emoción es mucha, pero sí nos estamos asando”, comenta Mariana, una fan de Ciudad de México que acampa junto a su hermano. “No hay sombra, no hay agua potable cerca, y los baños ya huelen terrible. Pero todo vale la pena por ver a Scorpions.”
En un intento por mantener el orden, los asistentes se organizaron en una lista de 100 nombres. Esa centena será la primera en ingresar cuando se abran las puertas del Teatro del Pueblo, donde la entrada general a la feria cuesta apenas 50 pesos.
El acceso incluye no solo el concierto, sino una variedad de actividades, comida típica y entretenimiento.
El concierto de esta noche, programado para las 9 p.m., será sin duda uno de los más memorables de la Feria. No solo por la talla internacional del grupo alemán, sino por la devoción de sus fans, que han transformado la explanada del recinto en una especie de campamento rockero, con todo y penurias.
Mientras tanto, el sol sigue su curso, el polvo continúa flotando y los acordes de “Wind of Change” ya se escuchan en bocinas improvisadas. La espera está por terminar. Y para quienes han aguantado más de 30 horas, la música sonará más fuerte que nunca.
